lunes, 12 de marzo de 2012

Osmoregulación en Mamíferos.

Con un riñón especial que presenta un Asa de Henle en nefrona que mantiene el gradiente aunque no controla el resultado final de la concentración de orina.
La Rama descendiente es permeable al agua y a las sales, el agua se encuentra con un líquido cada vez más concentrado (hasta 4 veces el del plasma en humanos). La Rama ascendiente presenta paredes gruesas e impermeables pero sí que permite el paso a iones como el sodio y cloro que en la parte fina pasan filtrándose y en la parte gruesa de la Rama ascendente existe un paso activo. El agua que rodea al Asa de Henle aumenta de concentración por la aportación de la misma Asa. El lóbulo distal entra en un Tubo Colector que vuelve a atravesar el gradiente osmótico y puede regular su concentración por la hormona antidiurética (ADH) que reabsorbe agua por el cuerpo para igualar las diferencias de concentración del medio extracelular que rodea al Asa. Al aumentar la hormona, aumenta la permeabilidad del tubo colector.
A más necesidad de absorber agua (rata del desierto) se modifica la médula que pasa a ser muy alargada proyectando una expansión o papila renal.
Hay una acusada asociación entre la capacidad concentradora y el medio con agua:
  • Los castores, topos de agua y las ratas de agua presentan una médula de grosor similar a la corteza y con una capacidad concentradora del triple del plasma.
  • Las ardillas y humanos con un grosor el doble que la corteza y concentrando de 4 a 6 veces más que el plasma aunque no todo en el largo Asa de Henle.
  • En musarañas, ratas-canguro y ratas del desiero se concentra de 9-10 hasta 22 veces, siendo 11 veces mayor la médula sobre la corteza.
Tanto animales del desierto y marinos han de disminuir las pérdidas hídricas teniendo en cuenta que con el aumento de actividad, aumenta el metabolismo y aumenta la pérdida de vapor de agua. Por ello aparecen mecanismos de contracorriente en las fosas nasales que disminuyen la pérdida de agua. Se presentan los Turbinales un ensanchamiento de las paredes de la cavidad nasal formando por una fina lámina que se recurva sobre si mismo pasando el aire cerca de las mucosas nasales humedeciéndose, saturándose y calentándose para así no dañar el epitelio respiratorio el aire que entra y tampoco deshidratándolo al enfriarlo las mucosas, pudiendo estar la nariz más fría que el ambiente. Al sacar el aire saturado de vapor al pasar por la mucosa, el aire se enfría y disminuye la saturación al enfriarse (entre 27-37°C se duplica el vapor de agua) y se condensa el agua en el turbinal y eso sirve para el segundo ciclo. Sale saturado de aire pero más frío y menos agua que en los humanos (aire de salida es más cálido).

Nacho Padró

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Quin és el teu Super-Comentari?