sábado, 15 de febrero de 2014

La Via Láctea: una historia de investigación fascinante

"Yo he vivido con la Vía Láctea más de un cuarto de siglo y nunca he acabado de admirar su belleza. Es uno de los fenómenos más grandiosos de la Naturaleza y un reto perpetuo a la curiosidad científica", escribió hace años el astrónomo holandés Bart J. Bok en un artículo de "Scientific American".
Federico Armenter, especialista en astronomía de la Vanguardia decía que "esa inmensacinta de luminosidad lechosa que en las noches sin nubes y sin Luna vemos brillar en el cielo cruzándolo de uno a otro horizonte, designada con el nombre de Vía Láctea en recuerdo de una leyenda mitológica, sabemos que se prolonga por el hemisferio opuesto formando un inmenso anillo alrededor del sistema solar". El telescopio ha resuelto esta tenue nebulosidad en millones de estrellas y sabemos que se trata de un sistema estelar compacto formado por un núcleo central y extensos brazos. Podríamos representarlo como una isla de estrellas, dentro de un Universo colosal que la envuelve. Entre sus infinidades de estrellas, nuestro sol hace un papel muy modesto, estando clasificado como entre las estrellas "enanas".
Su estudio fue arduo pues seguramente le costó centenares de siglos para pasar de la visión simplemente contemplativa del poblador de las cavernas y de las selvas vírgenes a la admirativa y escrutadora de los sacerdotes caldeos, chinos o egipcios y a la más elevada de los filósofos griegos. desde estos a Galileo, la misión del astrónomo fue principalmente descriptiva con aislados y esporádicos, aunque sorprendentes, atisbos de una mayor amplitud de visión.
Galileo, considerado el padre de la Astronomía moderna, al dirigir su modesto anteojo al cielo para la contemplación de los astros, realizó el primer intento de profundizar en el espacio y sus maravillas. Pero ció tantas cosas fascinantes del sistema solar, que no llegó a penetrar a través de la esfera en la cual se creía entonces que estaban fijadas las estrellas, consideradas como simules agujeros a través de los cuales resplandecía la gloria del empíreo.
A partir de Copérnico los astrónomos se ocuparon principalmente del estudio de las anomalías planetarias en la zona eclíptica para descifrar la estructura del sistema solar. Parece que será el humilde músico de regimiento alemán Hershel que al construir sus potentes telescopios empezó a concebir la idea de una Vía Láctea como universo estelar aislado en la inmensidad del Universo.
Del estudio de los movimientos propios de las estrellas próximas se ha deducido que existen corrientes estelares coordinadas, verdaderos movimientos de conjunto, llegándose a la conclusión que esa Vía Láctea de la cual formamos parte, en realidad no es más que un conglomerado de estrellas separado por distancias enormes de conglomerados similares designados en principio con los nombres de nebulosas y de galaxias , verdaderas islas de estrellas en medio de la negritud del universo.

La Via Láctea


Nacho Padró

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Quin és el teu Super-Comentari?