El Pleistoceno medio es un periodo crucial para estudiar la evolución humana en Europa porque marca la aparición de fósiles humanos anteriores a los neandertales y los pertenecientes a la tecnología lítica achelense, originada en África hace más de un millón de años y de la que no existen vestigios en Europa hasta hace menos de 500.000 años. Sin embargo, son escasos los yacimientos europeos que contienen restos humanos bien datados con restos de herramientas de esta industria.
En la cueva de Aroeira en Portugal, un equipo de científicos dirigido por el arqueólogo portugués João Zilhão, ha hallado durante el último día de campaña de 2014 un cráneo humano de 400.000 años de antigüedad. Junto a este fósil han aparecido además restos de fuego (hueso quemado), abundantes restos de fauna cazada por los habitantes de la cueva y herramientas de sílex y cuarcita, incluyendo numerosos bifaces (hachas de mano).
El cráneo fue extraído en un bloque de piedra y trasladado al Instituto de Salud Carlos III de Investigación sobre la Evolución y Comportamiento Humanos en Madrid para su preparación y restauración, un proceso que duró dos años. Según el estudio, que publica hoy la revista PNAS, supone el fósil humano más antiguo jamás hallado en Portugal, y el más occidental de los restos encontrados en Europa.
“Se trata de un hallazgo interesante en la península ibérica, una región crucial para entender el origen y la evolución de los neandertales”, dice Rolf Quam, antropólogo en la Universidad de Binghamton (EE UU) y uno de los autores del trabajo. “El cráneo comparte algunas características con otros fósiles del mismo periodo en España, Francia e Italia”, añade el científico.
"Junto con los restos de la Sima de los Huesos (Atapuerca) y de Tautavel (Francia), el cráneo de Aroeira representa una de las primeras poblaciones achelenses de Europa", añade Zilhão, del Seminario de Estudios e Investigaciones Prehistóricas (SERP) de la Universidad de Barcelona.
Precursores de neandertales
De este modo, el cráneo, que es uno de los primeros en el continente en asociarse con la industria lítica achelense, incrementa la diversidad anatómica del registro fósil humano. “Sugiere que diferentes poblaciones mostraron de alguna manera diversas combinaciones de rasgos”, indica Quam.
Los rasgos morfológicos del cráneo, incluyendo los arcos supraorbitales fusionados, exhiben características propias de los precursores de los neandertales, así como otros rasgos que parecen pertenecer a otras especies fósiles.
El cráneo, denominado Aroeira 3, abre un nuevo marco de referencia en paleontología sobre el estudio de la aparición de los rasgos morfológicos para conocer la evolución humana a lo largo de esta etapa clave en la que, a partir de los Homo erectus ancestrales, surgieron los neandertales y el hombre moderno.
"Esta etapa de la evolución humana habrá sido un proceso mucho más complejo que lo que hasta ahora se pensaba. Cada vez resulta más evidente que, a partir de los rasgos diagnósticos, no es posible discriminar “tipos” o “especies” en esta fase de la evolución humana. Por lo tanto, todo apunta al hecho que, hace 500.000 años, la humanidad constituía ya una sola especie, aunque mucho más diversa que hoy en día", concluye el científico portugués.
Entre los centros españoles que han participado en el estudio destacan la Universidad Complutense de Madrid, el Instituto de Salud Carlos III de Investigación sobre la Evolución y Comportamiento Humanos, la Universidad de Burgos, la Universidad de Barcelona y la Universidad de Granada.
Referencia bibliográfica:
Joan Daura et al. “New Middle Pleistocene hominin cranium from Gruta da Aroeira (Portugal)” PNAS 13 de marzo de 2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Quin és el teu Super-Comentari?